Antioquia sigue cumpliendo su tarea en la erradicación de cultivos de coca al lograr erradicar 879 hectáreas el año pasado.

Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), el área sembrada con cultivos de coca se incrementó hasta 2007 cuando alcanzó el nivel máximo de 9.926 hectáreas. Después entró en una tendencia a la reducción que se mantuvo en 2012 (-12%), con 2.725 hectáreas sembradas con cultivos de coca.

Si bien habría que consolidar las cifras oficiales y teniendo en cuenta que en lo que va de 2014 las hectáreas erradicadas suman 445, el departamento podría estar en 1.400 hectáreas con cultivos ilícitos.

La aspersión se redujo en una tercera parte respecto 2011 y la erradicación manual se redujo a la mitad. En los dos últimos años el 11 por ciento de la inversión de la Política de Consolidación Territorial se concentra en Antioquia.

A pesar de esta reducción, a la Policía Antinarcóticos le preocupan los cultivos de coca sembrados en los parques nacionales donde aumentó en un 11 por ciento.

Una excepción es el parque nacional del Nudo de Paramillo, donde el Ejército, con varias brigadas enfrenta la red de narcotráfico de las Farc y las bandas criminales que hicieron de ese lugar un fortín para los cultivos y las rutas hacia el Caribe.

Según estadísticas de ese organismo allí se pasó de 446 hectáreas de matas de coca a 408, en 2012.

¿Por qué la reducción? Según el secretario de Gobierno de Antioquia, Santiago Londoño, un peso clave lo lleva la política de erradicación en conjunto con el gobierno nacional, pero no deja de desconocer que el oro de la minería ilegal ha venido siendo una fuente de financiación significativa para los grupos ilegales.

Destacó, sin embargo, que los programas de sustitución de cultivos contribuyen a frenar la siembra de hoja de coca. Hoy, alrededor de 6.500 familias del Norte, Nordeste, Bajo Cauca hacen parte del programa de producción de cacao y caucho, a lo que se suma la oferta social en educación, infraestructura y salud de la Gobernación, con apoyo del Gobierno Nacional y de organismos extranjeros. 

El general Leonardo Pinto, comandante de la VII División del Ejército destacó la labor que cumple ese organismo en el Nudo de Paramillo entre Antioquia y Córdoba, donde han sido destruidos laboratorios y erradicado manualmente cultivos.

Especificó que las Farc trabajan allí de la mano de bandas criminales. "La guerrilla está dedicada a los cultivos y producción de pasta básica, mientras que las bacrim procesan el clorhidrato de cocaína con sus laboratorios y las rutas".

Agregó que detectó esta unión en Chocó y el Bajo Cauca antioqueño. Llamó la atención de Urabá, como ruta para sacar droga a Panamá y como zona de cultivos y laboratorios.